¿Hay competencia en el sector de la auditoría en España? | Compañías | Cinco Días:
El 68% de la facturación se concentra en siete firmas, lo que implica riesgos sistémicos.
31 JUL 2018 - 08:12 CEST
Recientemente, el Instituto de Contabilidad y Auditoría de Cuentas ha publicado el documento anual sobre “la Situación de la Auditoría en España- 2017”, informe que recoge los datos remitidos al ICAC por los auditores y las sociedades de auditoría correspondientes al período comprendido entre el 1 de octubre de 2016 y el 30 de septiembre de 2017.
Aprovechando la publicación de estos datos conviene hacer una serie de reflexiones en relación a la situación del mercado de auditoría de cuentas en España. En primer lugar, este documento solo incluye aquellos trabajos que realizan los auditores sujetos a la Ley de Auditoría de Cuentas, por lo que no reflejan la totalidad de la actividad desarrollada por el sector.
En segundo lugar, de los datos del ICAC, debemos destacar que en España hay 20.997 auditores individuales, de los cuales no llegan a 5.000 los que ejercen la actividad, ya sea como auditores ejercientes (4.016), o prestando sus servicios para otros auditores (955). Por otro lado hay 1.394 sociedades de auditoría, de las cuales 1.379 se hayan adscritas a alguna de las dos Corporaciones de auditores existentes, y de éstas sólo 1.200 sociedades han tenido facturación durante este último período.
La facturación del sector en los trabajos de auditoría regulados por la LAC en este último período ha alcanzado la cifra de 663.272.307 euros, por lo que podemos afirmar que la actividad del sector permanece más o menos estable ya que ha logrado un pequeño crecimiento que no alcanza los 12 millones, lo que representa un incremento de solo el 1,7%. Como se puede desprender de este dato, España no tiene un gran mercado en lo que se refiere a trabajos de auditoría regulados, y esto se debe a que somos un país eminentemente de pymes en el que solo un porcentaje muy pequeño del total de compañías españolas está sujeto a auditorías obligatorias. En este último período del 2017, se han realizado 60.556 trabajos de auditoría, de los cuales 8.270, un 14%, corresponden a informes emitidos a entidades grandes; 21.066, un 35%, corresponden a entidades medianas, y un 51 %, esto es 31.230 informes, son informes emitidos a entidades pequeñas, datos que por sí solos, reflejan el tejido industrial y económico español.
Otro dato muy importante a destacar, y que también se mantiene inalterable, es que aproximadamente el 95% de la facturación del sector se efectúa a través de sociedades de auditoría; y este año, al igual que en los últimos años, su facturación se ha incrementado un 2% respecto al año anterior, mientras que ha disminuido la facturación de los auditores individuales. Por lo tanto, podemos afirmar que de seguir así esta tendencia, llegaremos a un punto en el que el sector estará acaparado por sociedades de auditoría, y con ello el auditor individual tendrá un papel de menor relevancia.
Para tener un mayor conocimiento de lo que es y representa la actividad de auditoría en España, hay que destacar que en el sector trabajan 16.093 profesionales de los cuales 14.294 lo hacen en sociedades de auditoría y 1.799 para auditores individuales. Por tanto el 88%; es decir casi un 90% del empleo se concentra en sociedades.
Por otro lado, y como viene siendo también una constante en el sector, es un hecho que los honorarios de auditoría no son acordes con el nivel de preparación y conocimientos de los profesionales que trabajan, ni con los niveles de calidad y responsabilidad que se exigen para el desarrollo de la actividad de auditoría. Con respecto a este dato la información publicada por el ICAC muestra que en este período el precio/hora promedio se ha situado en 65,42 euros, lo que supone un descenso con respecto al año anterior (66,26 euros) de un 1,3%, y evidencia además que nos encontramos muy por debajo de los honorarios de otros países de nuestro entorno.
En otro orden de cosas, habría que insistir en el gran problema, que bajo mi punto de vista, es una de las grandes lacras de nuestra actividad, como es la enorme concentración que se da en la misma. Así de los datos publicados por el ICAC se aprecia que el 68% de la facturación total del sector se concentra en siete compañías, otro 10% lo hace en aproximadamente unas 60 compañías más, mientras que las 1.133 compañías restantes solamente tiene una cuota de mercado del 22%. Con estos números, parece que la competencia, factor fundamental en el desarrollo del cualquier sector, en el mantenimiento de la calidad y en el desarrollo de la innovación, está en peligro debido a que un grupo muy reducido de sociedades se reparten el mercado.
Un mercado tan altamente concentrado como el español, no puede gozar de las ventajas anteriormente mencionadas, y además, aporta una serie de riesgos sistémicos que pone en jaque tanto su desarrollo futuro como su estabilidad. Deberíamos analizar esta situación y realizar de forma rigurosa y responsable las acciones pertinentes para reducir sus efectos. Fruto de esta concentración, es que en España, a pesar de ser un país eminentemente de pymes, los pequeños y medianos auditores no tienen un papel relevante, a pesar de que se encuentran en mejores condiciones para prestar servicios a las mismas pymes, que las grandes firmas. Así solamente el 16% del total de los trabajos, es decir 9.802 auditorías, corresponden a entidades con una cifra de negocio superior a 30 millones de euros. Las entidades auditadas con cifra de negocio menor a 6 millones de euros representan un 38% del total. Con estos datos encima de la mesa, parece evidente que los pequeños y medianos auditores deberían liderar el mercado, y sin embargo este hecho no se da.
Carlos Puig de Travy es Presidente del Registro de Economistas Auditores (REA) del Consejo General de Economistas
"Siempre que enseñes, enseña a la vez a dudar de lo que enseñas", José Ortega y Gasset. En la Facultad de Empresa de la UAL: "Auditoría Financiera", "Responsabilidad Social Corporativa" y "Organizaciones sin Ánimo de Lucro", todas en el Grado de Finanzas y Contabilidad y este curso en la séptima promoción del Máster en Auditoría de Cuentas
martes, 31 de julio de 2018
CincoDías.com: ¿Hay competencia en el sector de la auditoría en España?, por Carlos Puig
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viernes, 13 de julio de 2018
Jornada conmemorativa del 30º Aniversario de la Ley de Auditoría de Cuentas (Madrid, 12 de julio de 2018)
Jornada REA conmemorativa del 30 Aniversario de la Ley 19/1988 de Auditoría de Cuentas (Madrid, 12 de julio de 2018)
Todos los presidentes coincidieron en destacar los importantes avances en materia de transparencia y el aumento de la calidad, la comparabilidad y la fiabilidad de la información económico-financiera en nuestro país. Así mismo, también valoraron de manera unánime la profesionalización del sector y el aumento de la calidad de los trabajos realizados, así como su capacidad de adaptación a los cambios legislativos y a las demandas realizadas por los usuarios de la información. En cuanto a los retos del sector, señalaron, entre otros, los siguientes: la necesidad de mantener la obligación de auditar en los niveles de tamaño actual –en cuanto que la rebaja de estos niveles supondría una importante pérdida de calidad de la información–; la colaboración público-privada para la mejora de la transparencia de la información de las administraciones públicas; avanzar en materia de buen gobierno corporativo e información no financiera, y adaptarse al desafío tecnológico.
El acto contó también con la asistencia, entre otras personalidades, de Jesús Betrián y José Luis Díez García, expresidentes del REA, Gerardo Ortega, expresidente del REA y expresidente del Consejo General de Economistas, Fernando González-Moya, expresidente del Consejo General de Economistas, Francisco Gracia, presidente de Economistas Contable (EC) del CGE y Salvador Marín, presidente de COFIDES.
Dispones de toda la información relacionada con este acto en el siguiente enlace y, además, acompañamos el dossier de prensa de la jornada:
Con
motivo del 30 aniversario de la Ley 19/1988, de 12 de julio, de Auditoría de
Cuentas, el Registro de Economistas Auditores (REA), principal
organización de auditores de España, celebró ayer, 12 de julio de
2018, un acto en el que participaron los seis expresidentes y el actual
presidente del Instituto de Contabilidad y Auditoría de Cuentas (ICAC), quienes
analizaron el camino recorrido en el campo de la auditoría de cuentas en estos
últimos 30 años y los objetivos concretos para seguir avanzando en la
transparencia y el aumento de la calidad de la información
económico-financiera.
En la
inauguración de la jornada participaron Valentín Pich, presidente
del Consejo General de Economistas de España, Lorenzo Lara, Vicepresidente
del Consejo General de Economistas de España y presidente de Honor del
Registro de Economistas Auditores (REA), Carlos Puig de Travy, presidente
del Registro de Economistas Auditores (REA) y Juan Carlos De Margarida, Secretario
del Consejo General de Economistas de España.
Valentín
Pich en su intervención
hizo referencia a que, "durante estos últimos treinta años, las
empresas españolas han apostado cada vez más por la transparencia de sus
cuentas, prueba de ello es que, en la actualidad, de los más de 60.000 informes
de auditoría que se emiten al año, casi el 30% son voluntarios”. “La
claridad y fiabilidad de la información financiera aumenta la confianza de los
inversores y resulta clave para lograr un buen rating que permita obtener
financiación”.
De izquierda a derecha: Ricardo Bolufer, Juan Carlos de Margarida,
Carlos Puig, Valentín Pich, Lorenzo Lara y Enrique Rubio.
Por su
parte, Carlos Puig, presidente del REA, reconoció los
avances en cuanto a la mejora de la calidad de la información financiera
durante estos años, si bien alertó sobre el problema que supone la actual
concentración del mercado: “la actual situación del sector, en el que cuatro
compañías concentran el 63% de la facturación, no favorece la
competencia, repercute negativamente en la calidad y dificulta la libre
elección de auditor”, “es necesario luchar contra esta situación de
desequilibrio, que es un caso único que no se da en otros colectivos, como el
de los abogados en el que sus cinco primeras grandes firmas no alcanzan ni el
20% de la facturación del sector”.
De izquierda a derecha: Ricardo Bolufer, Juan Carlos de Margarida,
Carlos Puig, Valentín Pich, Lorenzo Lara y Enrique Rubio.
El
presidente del REA analizó los datos recogidos en una comparativa sobre la
situación de la auditoría en España entre 1990 (primer año del que existen
datos oficiales del sector) y 2107, realizada por el Servicio de Estudios del
REA, destacando que el número de auditorías voluntarias aumentó un 392% entre
1990 y 2017 (de 3.490 a 17.183), dato este especialmente relevante si tenemos
en cuenta que el número de empresas en España apenas se ha duplicado en esos
casi 30 años (poco más de un millón y medio de empresas en 1990 y cerca de tres
millones trescientas mil en 2017). Reivindicó la figura de las pequeñas y
medianas firmas de auditores, quienes, en el actual contexto, se encuentran en
una situación desfavorecida. Según Puig de Travy, “un tema que en la
actualidad está sobre el tapete es cómo pueden simplificarse las normas de
auditoría para encargos de empresas de pequeño tamaño o poco complejas, a los
efectos de evitar trabajos innecesarios que no dan eficacia a la auditoría y
que recargan sus costes con el correspondiente prejuicio tanto para las pymes
como para los propios auditores de estas entidades”.
De izquierda a derecha: Ricardo Bolufer, Juan Carlos de Margarida,
Carlos Puig, Valentín Pich, Lorenzo Lara y Enrique Rubio.
A continuación,
tuvo lugar la mesa redonda "Principales Hitos - El papel de los
Profesionales - Retos", moderada por Ramón Madrid y Eladio
Acevedo, vicepresidentes del REA y en la que participaron por orden de
antigüedad en el cargo, Ricardo Bolufer Nieto (primer presidente del
ICAC: octubre de 1988 a septiembre de 1996); Antonio Gómez Ciria
(septiembre de 1996 - octubre de 2000); José Luis López Combarros
(octubre de 2000 - mayo de 2004); José Ramón González García (mayo de
2004 – junio 2009); José Antonio Gonzalo Angulo (junio 2009 – febrero
2012); Ana María Martínez-Pina (febrero 2012 – noviembre 2016) y Enrique
Rubio Herrera (noviembre 2016-actualidad). Todos ellos respondieron a tres
cuestiones: ¿Cómo estábamos en el 88 y cómo estamos ahora en materia de
información económico-financiera?; el papel de los profesionales del sector en
estos años, y retos en pos de la transparencia y la calidad de la información
económico-financiera.
De izquierda a derecha: Ricardo Bolufer, Antonio Gómez Ciria, José Luis López Combarros, José Ramón González García, José Antonio Gonzalo Angulo, Ana María Martínez Pina y Enrique Rubio.
Todos los presidentes coincidieron en destacar los importantes avances en materia de transparencia y el aumento de la calidad, la comparabilidad y la fiabilidad de la información económico-financiera en nuestro país. Así mismo, también valoraron de manera unánime la profesionalización del sector y el aumento de la calidad de los trabajos realizados, así como su capacidad de adaptación a los cambios legislativos y a las demandas realizadas por los usuarios de la información. En cuanto a los retos del sector, señalaron, entre otros, los siguientes: la necesidad de mantener la obligación de auditar en los niveles de tamaño actual –en cuanto que la rebaja de estos niveles supondría una importante pérdida de calidad de la información–; la colaboración público-privada para la mejora de la transparencia de la información de las administraciones públicas; avanzar en materia de buen gobierno corporativo e información no financiera, y adaptarse al desafío tecnológico.
De izquierda a derecha: Francisco Gracia, Carlos Puig, Ricardo Bolufer,
José Antonio Gonzalo Angulo, Antonio Gómez Ciria, Ana Mª Martínez Pina,
Valentín Pich, José Ramón González, José Luis López Combarros, Enrique Rubio, Ramón Madrid,
Lorenzo Lara y Eladio Acevedo.
El acto contó también con la asistencia, entre otras personalidades, de Jesús Betrián y José Luis Díez García, expresidentes del REA, Gerardo Ortega, expresidente del REA y expresidente del Consejo General de Economistas, Fernando González-Moya, expresidente del Consejo General de Economistas, Francisco Gracia, presidente de Economistas Contable (EC) del CGE y Salvador Marín, presidente de COFIDES.
Dispones de toda la información relacionada con este acto en el siguiente enlace y, además, acompañamos el dossier de prensa de la jornada:
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jueves, 12 de julio de 2018
EconomíaDigital.es: Los Carulla hacen oídos sordos a PwC: ocultan sus sueldos en GB Foods
Los Carulla hacen oídos sordos a PwC: ocultan sus sueldos en GB Foods:
Los dueños de GB Foods ocultan en sus cuentas los sueldos de los directivos de la compañía. Es el tercer año que omiten la información.
Barcelona, 12 de julio de 2018 (13:17 CET)
A la familia Carulla parece no importarle demasiado la opinión de sus auditores, pues año tras año hace oídos sordos a las advertencias de falta de información hechas por PwC. El dato escondido, los salarios de la alta dirección de GB Foods; la empresa que comercializa Gallina Blanca, Avecrem y Yatekomo.
En las cuentas de 2017 de la compañía, el auditor advierte de la opacidad de la saga catalana, también accionista del diario Ara y propietaria de Affinity Petcare. “Las cuentas no incluyen la información relativa al importe de los sueldos, dietas y remuneraciones de todo tipo, como pensiones y seguros de vida, relativos al personal de alta dirección”, alertan.
La omisión no es baladí, pues violenta la ley de sociedades de capital y el plan general de contabilidad español. Y es el tercer año que lo hace: los informes ya detectaron lagunas en el ejercicio 2015. Los ejecutivos volvieron hacer caso omiso al aviso.
¿Qué se esconde bajo la categoría de 'alta dirección'? La normativa internacional de contabilidad define como personal de alta dirección a “aquellas personas que tienen autoridad para planificar, dirigir y controlar las actividades de la entidad, incluyendo cualquier miembro del consejo de administración, sea o no ejecutivo”.
De este modo, la empresa debería haber declarado, al menos, la remuneración percibida por Artur Carulla, presidente de la empresa; Ignasi Ricou, consejero delegado; Joan Cornudella, consejero y director ejecutivo del hólding familiar Agrolimen; Luis Muntadas, consejero y director de estrategia y finanzas de Agrolimen; y Manel Gálvez, también consejero.
¿Quiénes son los Carulla?
En 2017, GB Foods obtuvo unos beneficios de 38,7 millones de euros frente a los 27,9 del año anterior; el 38,8% más. Las ventas también se dispararon desde los 540,2 millones hasta los 730,9 millones; el 35,2% más. No obstante, el negocio alimenario es sólo una rama entre sus intereses. El principal motor del grupo es Affinity Petcare, productora de comida para mascotas.
A través de la Fundación Carulla son accionistas del periódico Ara, uno de los principales altavoces del independentismo catalán. En 2016 tuvieron que salir al rescate de la empresa editora del medio de comunicación, Edicions de Premsa Periódica Ara. En concreto, concedió al rotativo un préstamo de 500.000 euros mientras que la firma Acta Diurna --propiedad de la familia Rodés-- prestó otros 250.000 euros.
Los dueños de GB Foods ocultan en sus cuentas los sueldos de los directivos de la compañía. Es el tercer año que omiten la información.
Barcelona, 12 de julio de 2018 (13:17 CET)
A la familia Carulla parece no importarle demasiado la opinión de sus auditores, pues año tras año hace oídos sordos a las advertencias de falta de información hechas por PwC. El dato escondido, los salarios de la alta dirección de GB Foods; la empresa que comercializa Gallina Blanca, Avecrem y Yatekomo.
En las cuentas de 2017 de la compañía, el auditor advierte de la opacidad de la saga catalana, también accionista del diario Ara y propietaria de Affinity Petcare. “Las cuentas no incluyen la información relativa al importe de los sueldos, dietas y remuneraciones de todo tipo, como pensiones y seguros de vida, relativos al personal de alta dirección”, alertan.
La omisión no es baladí, pues violenta la ley de sociedades de capital y el plan general de contabilidad español. Y es el tercer año que lo hace: los informes ya detectaron lagunas en el ejercicio 2015. Los ejecutivos volvieron hacer caso omiso al aviso.
"GB formula las cuentas según la legislación vigente", defienden los CarullaEl grupo, sin embargo, aseguró a Economía Digital “haber formulado las cuentas según la legislación vigente”. Declinó, a preguntas de este medio, compartir la información ocultada a los auditores.
¿Qué se esconde bajo la categoría de 'alta dirección'? La normativa internacional de contabilidad define como personal de alta dirección a “aquellas personas que tienen autoridad para planificar, dirigir y controlar las actividades de la entidad, incluyendo cualquier miembro del consejo de administración, sea o no ejecutivo”.
De este modo, la empresa debería haber declarado, al menos, la remuneración percibida por Artur Carulla, presidente de la empresa; Ignasi Ricou, consejero delegado; Joan Cornudella, consejero y director ejecutivo del hólding familiar Agrolimen; Luis Muntadas, consejero y director de estrategia y finanzas de Agrolimen; y Manel Gálvez, también consejero.
¿Quiénes son los Carulla?
En 2017, GB Foods obtuvo unos beneficios de 38,7 millones de euros frente a los 27,9 del año anterior; el 38,8% más. Las ventas también se dispararon desde los 540,2 millones hasta los 730,9 millones; el 35,2% más. No obstante, el negocio alimenario es sólo una rama entre sus intereses. El principal motor del grupo es Affinity Petcare, productora de comida para mascotas.
A través de la Fundación Carulla son accionistas del periódico Ara, uno de los principales altavoces del independentismo catalán. En 2016 tuvieron que salir al rescate de la empresa editora del medio de comunicación, Edicions de Premsa Periódica Ara. En concreto, concedió al rotativo un préstamo de 500.000 euros mientras que la firma Acta Diurna --propiedad de la familia Rodés-- prestó otros 250.000 euros.
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